Manual de Brujerías Modernas I


Hace poco un amigo ofreció regalarme un kit todo incluido para Brujerías Modernas.

Yo quedé impresionado. Soy honesto al decirlo. 

Levantarse por las mañanas para mirar tu altar particular ofrecido a algún santo. Sintiendo una tonelada de culpa por los pecados cometidos en el día anterior y por los que se cometerán en el futuro inmediato. Luego, mirar una imagen maternal de la Virgen Santísima y rogar su protección, sin olvidar encender una vela amarilla para atraer la prosperidad y la energía positiva, en la cual se inflamará una astilla de incienso que bendice puertas, ventanas y camas por toda la casa. Y al prepararse para el trabajo, realizar el rito monótono de todos los días, rezar sin pensar. Santiguándose más por temor que por convicción.

Es cierto. Cualquier Shamán, Cacique, K'inich o Ngenpin no tendría nada que envidiarnos.

Al igual que nuestos antecesores en la cadena evolutiva, también nuestra vida está cargada de ritos, la distinción radica en que los actuales simplemente se realizan de una forma diferente. 

Lo que me intriga realmente es si en realidad el objetivo sigue siendo el mismo o si es otro. Inclusive me hace pensar si la necesidad por la que en el año 2012 todos tenemos un ritual cotidiano (espiritual o no) es una elección o una imposición.

Poniéndole candela a esta cosa, se me ocurre pensar en dos extremos:

  • Los antibrujos modernos: Personas que conscientes de todo conlleva un rito deciden no hacer ninguno. Y por lo tanto le restan importancia a todo lo que tenga que ver con la materia espiritual o en su defecto, se preocupan por lo espiritual únicamente por el asunto de la forma (Ej 1.: "Yo no creo en nada, por eso en esta vida todo se paga". Ej 2.: "No importa que yo crea en el mensaje del pastor, lo importante es ir a socializar cada domingo por la mañana")
  • Los brujos especializados modernos: Son individuos a los que salir de la cama, lavarse los dientes o cerrar la puerta les implica un rito místico y energético. Si el viento gira demasiado hacia el norte en una mañana de Jueves Santo, coincidiendo con el día del año nuevo de tal dinastía china, implica que la vida será buena o mala, dependiendo -claro está- de la interpretación semanal del tarot de su astrólogo personal en línea. Este tipo de brujo moderno puede tener alguna orientación particular que rija su actuar, como lo pueden ser las Artes Orientales. También puede confundirse con algún TOC. (Ej 1.: "Si no me santiguo de tal o cual manera el día será malo por esa razón mística". Ej 2.: "Mi astróloga me lo advirtío, hoy Júpiter está en la tercera casilla de Orión y está enojado por ello". Ej 3.: "No lo puedo creer, me toqué dos veces la nariz, son tres!!!! Aaaaaaaaa!")


Todos necesitamos realizar algún rito. Con la finalidad que sea. Cada quién necesita concebirse en un contexto distinto al materialismo económico de la actualidad.

¿Cómo no necesitar de una que otra "brujería moderna" para salir adelante?

Te levantás y ves el periódico: cataclismo. Ves la noticias re-cataclismo. Escuchás la radio: mega-cataclismo. Transitás por tu día y ya no leés, ves u oís el cataclismo, sino que lo vivís. Salís del trabajo, se agudiza el asunto del corazón y como resolverte. Hablás, llamás, escuchás, te percatás y terminás el día como si hubieras pasado por la Guerra de las Galaxias sin armas de rayo láser y con tu banderita de la paz llena de hoyitos.

En este panorama cualquiera quisiera tener una pócima mágica que le solucione a uno un poco de la vida.

Ahora bien, no quiero caer en extremos brujísticos. Sólo quiero reconocer lo débil de la naturaleza humana. Si bien al menos yo que escribo acá me pienso en función de un Dios Único que nunca nos abandona, en algunas ocasiones la desesperación natural de la vida nos encausa a llenar de signos la esperanza de salir adelante y eso por ninguna razón puede estar mal.

Así entonces, si su vida es como la del resto de los seres humanos de este planeta, que luchan y se esfuerzan por aprender día con día y no caerse, yo lo/la invito a que practique cualquiera de estas dos recetas mágicas que elaboré con mucha dedicación en mi caldero:

  • Purifica-té: (Se toma dos veces al día para un efecto prolongado, preferiblemente a las 6am y a las 9pm). Levántese por el lado derecho de su cama, ponga primero el pie derecho en el piso (no le tome demasiada importancia a esto, si es el izquierdo no pasa nada), hable con la versión de Dios de la que usted sea devoto (a fin de cuentas es el mismo). Solicite Prudencia, Discernimiento y Dirección. Recomiendo invocarlo con la oración más sincera que pueda (hasta un "Hola" se vale). Una vez cumplida esta fase inicial, dirijase a la cocina y prepárese un té de hiebras, mezcle Manzanilla, Menta y Romero. Tómese en paz sin escuchar ningún aparato que pueda pertubar su calma inicial (cualquier cosa que se conecte a la electricidad o que tenga baterías). Báñese y pídale a la Madre Tierra que lo limpie tanto por dentro como por fuera con el agua que le regala. Crea en usted mismo/a y en lo que es capaz de lograr. Realice sus tareas cotidianas, no deje que nada le robe su serenidad ni la prudencia que Dios le regaló y agradezca constantemente a la Vida. *NOTA 1: En el caso de la noche, en lugar de bajarse de la cama más bien súbase, luego de prepararse el té, lo demás puede mantenerlo igual incluyendo la ducha para dormir. *NOTA 2: Si desea puede bañarse con las hierbas del té, pero el resultado será un mejor "cutis". Es mejor beberlas.


  • Conjuro espanta tristeza: (Vade retro mala yuyu). En donde quiera que se encuentre lleve en su cartera, bolso, bulto o maletín ejecutivo la siguiente indumentaria mágica: una guayabita, unas gotitas de espíritu de azahar, unas bolsitas de té de frutas y una flor. En caso de que la tristeza le sorprenda por media avenida central saque de inmediato la Guayabita y cómala con el placer de caviar fresco (es importante que gesticule de tal manera que todos envidien su encuentro guayabitesco). Esto con seguridad espantará momentáneamente la tristeza, está comprobado científicamente los beneficios del chocolate en la depresión. A continuación rocíe unas gotitas de espíritu de azahar en el piso y repita: "Soy lo suficientemente valioso como para que la tristeza me paralice". Es conveniente percatarse de que las gotitas de azahar son sólo un fármaco y que ningún medicamento psiquiátrico, por más poderoso que sea, le otorgará la verdadera felicidad. En cuanto tenga a su disposición un vasito con agua caliente saque el té de frutas y tómeselo en infusión (sabe mejor si reposa de 2 a 3 minutos sin azúcar). Saque la flor de su bolso y admírela y piense en lo que tuvo que haber sucedido para que esa flor, bella en sí misma, estuviera en sus manos! Siéntase realmente feliz... Como cierre del conjuro puede usted gritar mientras brinca dando círculos, es imprescindible que si cierra el rito de esta manera, se rasque el estómago haciendo tríangulos mientras mira hacia el norte. Si lo prefiere también puede cerrar sus ojos y agradecer a Dios y a la Vida por haberle permitido conservar la serenidad, esto sustituye las vueltas y brincos en círculos.


Espero que estas recetas le resulten de utilidad y le permitan ser cada día una persona que se reconoce débil, pero con la tenacidad de querer salir avante cada día y de no dejarse vencer!

Que viva su belleza interior!

JEGR.

Comentarios

  1. Voy con el purifica-té. Aunque será tomar-té, embarrar-té, bañar-té y perfumar-té con la mezcla de hierbas a ver si acaso.

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